Huelga de médicos: el Gobierno de Ximo Puig se enroca sin responder a las reivindicaciones
El sindicato convocante deja en el aire la reunión clave de mañana con la Administración ante el silencio del Ejecutivo
Los paros están previstos para la próxima semana, en pleno ascenso de las patologías respiratorias
Ximo Puig ignora a los médicos a un mes de la huelga que paralizará la Sanidad valenciana
La huelga de médicos del sistema público valenciano convocada por el sindicato CESM-CV, mayoritario entre los facultativos en este territorio, y que mantiene en jaque al Gobierno valenciano que preside el socialista Ximo Puig sigue en pie. Y ello, porque el Ejecutivo de Puig no ha presentado la respuesta a las reivindicaciones de los facultativos en el plazo acordado, que expiró a última hora de ayer, según han confirmado fuentes de sindicato convocante. Los paros están señalados para los días 17 y 18 de este mes de enero. Pero se prolongarán si no hay entendimiento entre Administración y sindicato.
Sólo imaginar lo que puede suceder si esa huelga se lleva a cabo produce vértigo, porque la situación ya es crítica: en pleno repunte de las patologías respiratorias y con demoras en las citas que alcanzan entre 15 y 20 días, según las mismas fuentes.
El sindicato CESM-CV convocó la huelga el pasado 29 de noviembre de 2022. El 12 de diciembre seguían sin recibir propuesta de diálogo del Ejecutivo de Ximo Puig. Las partes sí llevaron a cabo una reunión posterior. Y el último compromiso, siempre según las citadas fuentes, fue que la Consejería respondería a sus reivindicaciones en un plazo que expiró la noche de ayer, lunes. Y que mañana, miércoles, los equipos negociadores se sentarían a negociar, una vez los órganos correspondientes del sindicato hubieran estudiado el documento.
Al no existir documento de respuesta a las reivindicaciones por parte de la Consejería de Sanidad valenciana que dirige Miguel Mínguez, las fuentes consultadas del sindicato han sostenido que no encuentra motivos para que se celebre la reunión clave con la Administración. Necesitan al menos 48 horas para estudiar esa contrapropuesta, que aún no han recibido.
Además, los médicos están seriamente contrariados después de que ayer, lunes, Miguel Mínguez manifestara que veía «altamente probable» que se desconvocara la huelga. A estas horas el enfado entre los facultativos con el Gobierno de Ximo Puig es monumental.
Los facultativos no entienden ese optimismo del consejero, porque si no hay propuesta no hay diálogo. Y si no hay diálogo, lo que sí habrá será huelga. Si finalmente no hay acuerdo y la huelga convocada para dentro de 7 días se consuma, los servicios mínimos no darán abasto. La gota de agua que le falta a la Sanidad de Ximo Puig para colmar la paciencia de los usuarios del sistema.